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¿Cómo debe ser un buen líder en la empresa?

Seleccionar a las personas de las cuales dependerán los resultados de la compañía es una decisión fundamental para alcanzar el éxito. Cuando hablamos de liderazgo seguimos pensando que el carisma, la inteligencia y otros rasgos personales eran la clave del liderazgo efectivo.

Pero en los últimos años, la nueva psicología del liderazgo se fundamenta en el liderazgo participativo basado en valores. Se trata de un modelo de gestión en el que el líder establece una relación muy estrecha con los miembros de su equipo, una relación de beneficio mutuo en la que cada uno aumenta la efectividad del otro.

A través de establecer fuertes lazos de confianza y comunicación, permiten al líder conocer los valores y aspiraciones de cada integrante del equipo, a los que deberá inspirar, orientar y estimular. Todo ello repercutirá positivamente y aumentará el compromiso y motivación, y en consecuencia, la productividad general en el trabajo.

Es por ello, que un buen líder puede influir en el comportamiento del equipo, y así crear una identidad compartida que persiga las mismas metas. Y esta identidad compartida se basa en establecer vínculos.

Un reconocido experto en liderazgo, George Kohlrieser, explica por qué fases se debe pasar para establecer ese vínculo.

En primer lugar, el líder debe conectar con las personas, los lugares y las metas. Y, a través de la curiosidad y el interés propio, establecer el vínculo con sus seguidores, y generar engage con ellos.

Pero el vínculo no tiene que ser necesariamente presencial. El directivo debe ser capaz de estar pendiente de las personas, así como gestionar sus emociones.

En línea con este punto, es el llamado proceso de duelo. Convertir el fracaso o la frustración puntual del equipo en motivación es la clave del éxito de todos los líderes.

Para Kohlrieser, el buen líder debe empatizar y encontrar una solución a través de la motivación.

Los buenos líderes participativos se caracterizan por una sana inteligencia emocional y un forjado pensamiento crítico. El primero es el que proporciona auto-liderazgo, que conlleva auto-conocimiento, auto-regulación y auto-motivación. El segundo tiene que ver con la capacidad de analizar, observar y procesar la información para ser capaces de tomar decisiones propias.