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Conocido es el riesgo existente actualmente respecto a los peatones que van por la calle mirando constantemente el móvil y sin fijarse en semáforos o vehículos que puedan venir antes de cruzar una calle o un paso de peatones.

La concentración en la conversación y lo que esté pasando en su teléfono móvil, aumenta la falta de atención respecto a las normas y señales que nos encontramos cuando circulamos por las vías, así como las distracciones.

Existe una solución para alertar a a este tipo de viandantes “adictos al móvil” y evitar así un gran número de atropellos y/o muertes. 

Los Países Bajos, en concreto la ciudad de Bodegraven, ha sido la última en implementar este tipo de señalización en sus calles.

Se trata de semáforos LED a ras de suelo que cambian de color rojo a verde según esté el semáforo principal. Permite al viandante ver si puede cruzar o no la calle sin levantar la vista del suelo, lo cual hace disminuir la posibilidad de atropellos por distracción.

Bodegraven es la última pero no la primera ciudad que apuesta por esta medida. Ausburgo, Sidney y Seúl ya han incorporado este tipo de señalización en sus calles para evitar los atropellos a peatones por distracción debido al uso inadecuado del móvil.