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Las grandes empresas españolas prevén crear empleo en los tres próximos años
El último informe ‘Global CEO Outlook’ elaborado por KPMG, ha encuestado a 1.278 CEOs de varios países, y concluye que un 70% de los ejecutivos españoles creará empleo en los próximos tres años. De ellos, un 48% aumentará su plantilla entre un 6% y un 10%, un 14% de las corporaciones entre un 11% y un 25% y un 8% lo hará por debajo del 5%.
De la encuesta se extrae que los 50 primeros ejecutivos de corporaciones españolas se colocan como los segundos más optimistas del mundo, donde nueve de cada diez tiene más confianza en las previsiones de crecimiento de España de cara a los próximos tres ejercicios.
Un 92% de los ejecutivos muestran más confianza que hace un año sobre el crecimiento del propio negocio, donde los mayores beneficios se repartirán entre 2016, siendo el mejor año para un 22% de los directivos, frente al 30% que considera que tendrán mayor retorno en 2017.
El informe revela que el optimismo respecto al crecimiento del propio negocio es mayor en Europa que en EEUU, con un 70% de los directivos europeos frente al 19% de los primeros directivos norteamericanos.
Los resultados del informe muestran un ‘claro cambio de ciclo’ de las empresas españolas, tras varios años de crisis económica y fuertes ajustes, donde la prioridad para un 52% de los ejecutivos será buscar nuevas oportunidades de crecimiento, por delante de la reducción de costes.
Para las empresas españolas, Estados Unidos sigue siendo la primera opción a la hora de expandirse internacionalmente, así lo señala el 90% de los encuestados. Brasil también resulta atractivo para el 70%y Sudamérica para un 62% de los encuestados.
De cara al futuro, el director de sistemas de información (IT) y el máximo responsable de innovación serán dos de los activos de mayor importancia, debido al reto que presenta estimular la innovación dentro de la empresa.
Por último, el informe recoge la opinión de los directivos respecto a los principales riesgos a corto plazo. En primero lugar, los riesgos estratégicos, operacionales y de cadena de suministro y le sigue el riesgo de tecnologías emergentes, un elemento que inquieta a los altos cargos de las empresas.