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Ahorrar 2.100 millones gracias al combate del fraude en desempleo
El Ministerio de Empleo y de Seguridad Social se marca como objetivo la lucha contra el fraude en las prestaciones de desempleo para reducir el gasto##. En este sentido, el Gobierno quiere dar de baja por infracción a 400.000 demandantes para 2015, con el objetivo de ahorrar 2.100 millones de euros, casi el 50% de los 4.426 millones de euros previstos de reducción del gasto en la protección por desempleo para 2015. El presupuesto total es de 25.003 millones de euros, con un descenso del 15% respecto a este año.
La lucha contra el fraude es una prioridad. En 2013, el incremento de los controles en las prestaciones ya causó 341.000 bajas, y para este año la cifra prevista es de 434.148, parecido a lo proyectado para 2015. Así, las detecciones por fraude siguen una línea ascendente que contrasta con el descenso habido en ese mismo tiempo en el número de perceptores de prestaciones por desempleo. En 2010, el desempleo alcanzó su cifra más alta, con tres millones de beneficiarios y, a partir de ahí, la cifra ha ido bajando de forma paulatina. En agosto, por ejemplo, era de 2.524.715 personas.
Pero hay más razones que explican el descenso de beneficiarios de las prestaciones, además de la recuperación económica y la lucha contra el fraude. Una de las principales es el paro de larga duración existente, que conduze a que muchas personas hayan agotado la prestación. De hecho, en los últimos años se está disparando el número de beneficiarios en la renta activa de inserción, una ayuda de 426 euros que perciben los parados mayores de 45 años que han agotado todas las prestaciones y tienen unos ingresos inferiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional.
La lucha contra el fraude es una prioridad. En 2013, el incremento de los controles en las prestaciones ya causó 341.000 bajas, y para este año la cifra prevista es de 434.148, parecido a lo proyectado para 2015. Así, las detecciones por fraude siguen una línea ascendente que contrasta con el descenso habido en ese mismo tiempo en el número de perceptores de prestaciones por desempleo. En 2010, el desempleo alcanzó su cifra más alta, con tres millones de beneficiarios y, a partir de ahí, la cifra ha ido bajando de forma paulatina. En agosto, por ejemplo, era de 2.524.715 personas.
Pero hay más razones que explican el descenso de beneficiarios de las prestaciones, además de la recuperación económica y la lucha contra el fraude. Una de las principales es el paro de larga duración existente, que conduze a que muchas personas hayan agotado la prestación. De hecho, en los últimos años se está disparando el número de beneficiarios en la renta activa de inserción, una ayuda de 426 euros que perciben los parados mayores de 45 años que han agotado todas las prestaciones y tienen unos ingresos inferiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional.